Un grupo de 25 niños y niñas del municipio de Puerto Tejada están transformando sus vidas a través de la música, gracias al programa de ocupación del tiempo libre de la Fundación Propal. En la Escuela de Violín y Violoncello, estos pequeños talentos aprenden a interpretar estos hermosos instrumentos, encontrando en ellos una fuente de inspiración y un camino para alejarse de las problemáticas sociales que los rodean. Un refugio de armonía La Escuela de Violín y Violoncello de la Fundación Propal ha sido un faro de esperanza para muchos niños y niñas de Puerto Tejada. A través de la música, han encontrado un espacio donde expresar sus emociones, desarrollar su creatividad y fortalecer su autoestima. Asimismo, los pequeños han trabajado arduamente para el concierto de mitad de año interpretando melodías clásicas. “La música es un lenguaje universal que tiene el poder de transformar vidas”, afirmó Marcela Martinez, Directora Ejecutiva. “En la Escuela de Violín y Violoncello, brindamos a los niños y niñas la oportunidad de descubrir su potencial y encontrar un camino positivo para su futuro”. Aprendiendo con alegría La metodología Suzuki, utilizada en la Escuela de Violín y Violoncello, se basa en el aprendizaje temprano y el desarrollo de habilidades a través del juego y la diversión. Los niños y niñas aprenden a tocar el violín o el violoncello de manera natural y progresiva, disfrutando del proceso y desarrollando un profundo amor por la música. “Me encanta venir a la escuela de música”, expresó uno de los estudiantes. “Aquí puedo aprender a tocar un instrumento que me apasiona y hacer muchos amigos”. Un futuro lleno de posibilidades Los niños y niñas que participan en la Escuela de Violín y Violoncello de la Fundación Propal no solo desarrollan habilidades musicales, sino que también fortalecen su disciplina, concentración y trabajo en equipo. Estas habilidades les serán de gran valor para enfrentar los retos del futuro y alcanzar sus sueños. “La música es una herramienta poderosa que puede abrirles muchas puertas a estos niños y niñas”, señaló Jaime Cifuentes, Profesor de la escuela de violín y violoncello de la Fundación Propal. “Esperamos que a través de la música, puedan encontrar un futuro mejor y más próspero”.
Verano divertido y seguro en El Guabal, Fundación Propal Celebra la Novena Versión de Vacaciones Recreativas
La alegría y el entusiasmo llenaron la escuela de la vereda El Guabal durante dos semanas con la novena versión de las vacaciones recreativas realizadas por el programa El Buen Vecino de la Fundación Propal. A través de diferentes actividades lúdicas, recreativas y culturales, niños, niñas y jóvenes disfrutaron de un verano lleno de diversión, aprendizaje y nuevas experiencias. Un verano lleno de aventuras Las vacaciones recreativas de la Fundación Propal se han convertido en una tradición esperada por los niños y niñas de la vereda El Guabal. Este año, el programa ofreció una amplia variedad de actividades diseñadas para estimular su creatividad, fomentar el trabajo en equipo y fortalecer sus valores. “Las vacaciones recreativas son una oportunidad para que los niños y niñas disfruten de su tiempo libre de una manera sana y segura”, contó Maribel Zapata, Coordinadora del programa El Buen vecino. “A través del juego y la recreación, aprenden valores importantes, desarrollan nuevas habilidades y crean recuerdos inolvidables”. Un espacio para el aprendizaje y la diversión Entre las actividades que se desarrollaron durante las vacaciones recreativas se encuentran: Talleres de manualidades y pintura Juegos tradicionales y deportivos Cine Charlas sobre temas de trabajo en equipo y valores Un impacto en la comunidad Las actividades de la Fundación Propal no solo benefician a los niños y niñas participantes, sino que también tienen un impacto positivo en la comunidad en general. Al ofrecerles un espacio de recreación y aprendizaje, se contribuye a prevenir problemáticas sociales. “Me agrada mucho venir a las vacaciones recreativas porque me divierto y aprendo cosas nuevas”, expresó Sara, participante de las vacaciones recreativas. “Gracias a este programa, nuestros hijos tienen la oportunidad de divertirse sanamente y aprender cosas nuevas”, contó Ana Yudi Mina, madre de niña participante. La Fundación Propal invita a todas las comunidades a trabajar por el bienestar de los niños y niñas, brindándoles oportunidades para ocupar su tiempo libre de manera positiva y constructiva
Vacaciones recreativas y constructivas en la vereda El Guabal
Desde el programa El Buen vecino la Fundación Propal continúa apostándole a la sana ocupación del tiempo libre de niños, niñas y jóvenes que se encontraban en receso escolar. Para este año las vacaciones recreativas estuvieron enmarcadas bajo el lema: “Amando y perdonando nos vamos sanando” bajo una oferta de actividades recreativas, utilizando como estrategia la lúdica, en temas como: trabajo en equipo, rescate de las tradiciones, fortalecimiento de valores, entre otros. Durante 3 semanas los 117 participantes estuvieron felices realizando actividades artísticas, culturales y deportivas que contribuyen a la sana convivencia. Dirigidas a niños y niñas de 6 a 16 años de edad proporcionando bienestar y recreación. El equipo incluyó actividades como: · Eucaristía de apertura a las vacacionesprofundizando en el amor y en los sueños de la comunidad. · Encuentro deportivo · Talento en acción – concurso · Manualidades artesanas – elaboración demanilla · Juegos tradicionales · Día recreativo · Despedida Como una estrategia de intervención y socialización 15 jóvenes que hacen parte del grupo de beneficiarios del subsidio de transporte, realizaron su proyecto de contribución en estas semanas enfocadas al juego y la diversión ayudando y acompañando a los niños y niños en una sana recreación