Con el aroma de la cocina y la alegría del aprendizaje, la Fundación Propal llevó a cabo el taller “Sabores y Saberes”, un espacio de esparcimiento, reflexión y empoderamiento para las 20 madres o acudientes de los niños y niñas que hacen parte del componente de recuperación nutricional del programa de primera infancia en su versión 2024. “Este taller es una oportunidad para que las madres fortalezcan sus conocimientos en nutrición, pero también para que se conecten consigo mismas, reconozcan su importancia en el cuidado de sus hijos y compartan experiencias”, expresó Maria del Pilar Mosquera, Coordinadora programa Primera infancia “Creemos que el bienestar integral de las madres es fundamental para el desarrollo saludable de sus pequeños”. Un viaje de momentos El taller “Sabores y Saberes” se desarrolló en cinco momentos, cada una con un objetivo específico: 1. Conocimiento nutricional: La nutricionista del programa guió a las madres en un recorrido por los principios básicos de una alimentación saludable, brindándoles herramientas para preparar comidas nutritivas y deliciosas para sus familias. 2. Autocuidado: El trabajador social del programa facilitó un espacio de reflexión y diálogo, donde las madres pudieron reconocer la importancia del cuidado personal y la autoestima en su rol como cuidadoras. 3. Manos a la obra: Las participantes, divididas en grupos, pusieron en práctica sus conocimientos al preparar una receta saludable de su elección, utilizando la variedad de alimentos disponibles y dispuestos para esta actividad (Desayuno, merienda, almuerzo, merienda y lonchera) 4. Reconocimiento y celebración: Cada grupo presentó su creación culinaria, compartiendo recetas y consejos. Se premió a la preparación más creativa y nutritiva. 5. Compromiso y seguimiento: Se realizó un reconocimiento a las familias que han demostrado mayor compromiso con el proceso nutricional de sus hijos, reforzando la importancia de una alimentación saludable para recuperar su estado nutricional. Un espacio de transformación Para las participantes, el taller “Sabores y Saberes” fue más que una simple actividad culinaria. Fue un espacio de reflexión, reconexión consigo mismas y aprendizaje de nuevas habilidades. “Este taller me ha enseñado que cuidar de mí misma es tan importante como cuidar de mis hijos”, expresó Sorany Lucmi Palacios. “Ahora me siento más segura y preparada para ofrecerles una alimentación saludable”.